Dios manda

 

Dios manda

Un amigo encontró al conocido eclesiástico Phfflip Brooks paseándose a grandes zancadas por su estudio, dando visibles muestras de impaciencia.

-¿Qué te pasa? -le preguntó.

-Me pasa -le contestó el doctor Brooks-, que yo tengo prisa… pero Dios no la tiene