Un Dios Justo
Durante la guerra civil en los Estados Unidos un soldado golpeó a su capitán y lo sentenciaron con severidad. Sus amigos, por medio de un juez, intercedieron con el Presidente Lincoln a favor del soldado; y el presidente contestó: “Vayan al Congreso, y si pueden conseguir que hagan una ley autorizando a un soldado pegar a su capitán, yo perdonaré al joven”. Los amigos comprendieron muy bien. El presidente no podía mostrar parcialidad a un soldado simplemente porque tenía amigos de influencia.
Dios es un dios justo. El no muestra parcialidad. Es justo tanto con los débiles como con los poderosos. Pero también es misericordioso.